El aumento de la reacción
La represión, sin embargo, se cernió sobre los bolcheviques: Trotski fue encarcelado, Lenin se vio obligado a huir y a refugiarse en Finlandia y el periódico bolchevique Rabochi i Soldat (Obrero y Soldado) fue prohibido. Los regimientos de artilleros que habían apoyado la revolución se disolvieron, siendo enviados al frente en pequeños destacamentos, al tiempo que los obreros eran desarmados. 90 000 hombres tuvieron que abandonar Petrogrado; se encarceló a los «agitadores» y se restauró la pena de muerte, abolida en febrero
La reacción aumentó, con el zarismo levantando la cabeza; produciéndose pogromos en las zonas rurales. Kérenski sucedió a Georgi Lvov, monárquico moderado, al frente del Gobierno provisional tras las Jornadas de Julio, pero fue perdiendo progresivamente la consideración de las masas populares y parecía incapaz de contener el crecimiento de la reacción.